Mario, no tan solo estuvo varado fuera del país por culpa del Covid 19, sino que también tuvo que cumplir con la cuarentena obligatoria al regresar al país del exterior donde se encontraba. El experimentado atleta, que participó y consiguió excelente resultado tanto en los Ironman realizados en Termas de Río Hondo, como en distintas partes del mundo, nos comentó su experiencia y como trató de sobrellevar el confinamineto.
En dialogo con Pasión & Deporte, el triatleta se mostró muy contento por la reapertura de los gimnasios, ya que actualmente regentea varios en Santiago del Estero. Al consultarle no dijo, "La verdad que estoy muy contento por volver a trabajar. Hemos estados tres meses desocupados y no es muy grato esto, aunque lo mas importante es que tenemos salud que es lo que mas se valora en esta época, pero estar sin poder realizar la ocupación diaria es una carga importante, pero gracias a Dios ya volvimos a trabajar. Esperemos tener una vida nueva y buena que nos ha puesto el mundo por esta pandemia.
¿Como fue su estadía y vuelta al país teniendo en cuenta que estaba en Estados Unidos cuando comenzó esto?
Llegue a Atlanta a mediados de marzo junto con el bloqueo. La verdad que allá nunca se dio el aislamiento estricto, fue básicamente direccionado, siendo la responsabilidad individual, con permiso hasta para salir a correr. Nunca prohibieron realizar actividad física, todo lo contrario, creció muchísimo. En ese tiempo creció la venta de bicicletas. En los parques estaban los avisos de protocolos de no correr dos o tres personas juntas, manteniendo siempre la distancia. Todo era normal, salvo en lo comercial con el cierre de los negocios, pero después de tres semanas abrieron nuevamente. Todo se basaba en el distanciamiento. Cuando llegue a Santiago, cumplí con el protocolo de aislamiento de 14 días y después m ehice el hisopado cuando estaba terminando la cuarentena, y ahora por suerte todo salió muy bien, ahora tratando de llevar una vida normal y aprender de todo esto.
¿Y volver a trabajar?
Nosotros volvimos el martes 16 con la supervisión y el estricto cumplimiento del protocolo para trabajar de manera cómoda y segura, tanto para los profesores como para los clientes. Pero esto no solo lo cumplimos nosotros, sino también los otros gimnasios siguiendo las normativas a nivel mundial. Esto es una responsabilidad de todos. El cuidado individual y colectivo es lo que tenemos para combatir, ya que este virus tiene en vilo al mundo
¿Como fue esta primera semana?
Para nosotros fue muy productiva. Hemos tenido una buena respuesta de la gente y también la necesidad de tener actividad, de ir al gimnasio, de ser guiado. Estamos saliendo de una neblina del miedo e incursionando en un camino totalmente diferente en cuanto al comportamiento social y cultural. Estamos en ese camino exponencial positivo que nosotros nos sentimos bien porque no solo porque volvimos a ayudar sino también ayudar a la gente a volver a la actividad física.
¿En un atleta de elite, como repercutió en lo físico y mental estos tres meses sin actividad?
Más bien soy un viejo cascarrabias porque me gusta competir como les digo a los jóvenes. Los atletas estamos en un proceso de pre- pretemporada sin un objetivos principal en cuanto al club de triatlón que tenemos y a los demás corredores. Esto sería un proceso de adaptación puesto que hubo un análisis de los entrenadores que tenemos en el club (IronSport) que nos reunimos para ver cuáles son las respuestas a la pandemia y en cuanto al rendimiento físico que hay que trabajar y hablar mucho con las personas. El levantamiento de las restricciones a las salidas y a los entrenamientos significaron muchas cosas en cuanto a lo psicológico y a lo social, teniendo en cuenta que antes salían a correr una hora y ahora no lo van hacer igual, porque los músculos y el sistema cardiovascular no esta preparado. Si bien el cerebro esta empujando a que quieras poder entrenar. Realmente hay que hacer mucha docencia, mucha pedagogía con respecto a esto. Hay otro contexto, sin competencias y eso también juega en las personas acostumbradas a participar en las diferentes eventos deportivos. Pero dentro de todo eso, tratamos de seguir manteniéndolos motivados a los atletas.
Se ha generado un poco la impaciencia en los deportistas por volver a entrenar, teniendo en cuenta que esto lleva a perder masa muscular, ¿como se trabaja en ese tema?
Hay que hacer mucha pedagogía con respecto a la vuelta en cuanto a lo nivel mental esta con muchas ganas, el cuerpo no está en condiciones de exigirlo como lo hacia antes de la cuarentena. Hay que hacer un proceso de adaptación entre 2 y 6 semanas, tratando de llevar de a poco en forma progresiva, gradual y sistemática. El problema es que si no lo hace de esa manera, se puede lesionar al poco tiempo de comenzar. Si se sobre entrena, comienzan aparecer las lesiones. Hay que hablar sobre las condiciones en las que se encuentra el cuerpo.
¿En que hay que hacer más hincapié, en lo físico o en lo mental?
Yo creo que el ser humano es un ser integral. Para nosotros el factor más importante es lo psicológico, es el centro de control. No ir hacia los músculos ni al corazón. Desde ahí hay que abordar el tema. Hay una reconstrucción psicosocial y cultural porque ahora nosotros con el distanciamiento social, llevar adelante un protocolo, desde ahí hay un proceso de adaptación en como nos manejamos. Ya no puedes esperar un estiramiento por un profe sino a un distanciamiento social guiado, saludarnos de manera diferente, desde ahí también hay un bloqueo para los latinoamericanos porque estamos acostumbrados a los abrazos y todo eso porque somos muy demostrativos. Desde los psicológico el atleta ya no puede salir a correr en grupo de a 10, ya no puede juntarse y establecer otro tipo de contacto. Va a ser un proceso lineal de aprendizaje.
